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¿Femenino? ¿Andrógino? No, claro que no, en su cuerpo no hay ni un centímetro que pueda describirle de tal manera, pues posee una anatomía y un físico  que cualquier hombre envidiaría y no porque se trata de la 5ta maravilla del mundo (aunque él lo cree así) sino porque en cada uno de sus movimientos , su forma de expresarse y hasta inclusive en cada paso a paso que da denota masculinidad a la par en que la sensualidad digna de una reina de antiguo Egipto derrocharía solo con moverse  un par de centímetros, pero ya siendo objetivos y dedicándose a admirar su  fisionomía desde un punto más lógico se puede decir que posee una estatura admirable pues ronda los 1.80 cm  donde cada una de sus extremidades se acopla a la perfección  haciéndole sobresalir del resto, es delgado… pero no por ello puede decirse que está en los huesos, claro que no, pues posee músculos marcados  lo que no quiere decir que exageradamente, pues se ha preocupado de mantener en armonía toda su anatomía; vientre plano, brazos y piernas bien trabajadas que terminan al fin en un trasero firme.
Sin embargo acabando con toda la simetría que su cuerpo podría mostrar, ahí justo en su rostro está la marca que le ha perseguido  durante siglos, uno de sus orbes, uno de sus preciados y dorados orbes fue arrebatado, arrancado de su cuenca para así dejar una cicatriz que jamás será borrada, esta misma yace cubierta por un parche  que jamás, ni siquiera cuando se ducha, se quita.
Siguiendo con sus facciones, no es precisamente alguien de facciones muy fuertes, pues aun cuando no puede confundírsele con una fémina, posee pómulos suaves y una piel tersa que fácilmente podría ser marcada o dañada sino fuera por el atractivo tono que la misma posee, un tono tostado suave que se extiende uniformemente por toda su anatomía dejando en claro el lugar donde podría provenir. Arabia, Egipto o inclusive Turquía, sin embargo, contradiciendo  los estándares físicos de tales lugares su cabello ha heredado un tono rojizo intenso que haría que cualquiera dudase sobre su verdadero origen.
Además de ello posee en su brazo izquierdo un tatuaje que ha sido marcado en el desde la mano hacía el codo, es una marca de “pertenencia”, algo que pasó a él antes de que huyese de su amo y fuese por ahí haciendo el vago, esta tiene un significado oculto inclusive para él.

En su forma animal no es ni uno de esos míticos animales que tanto se describe en los antiguos escritos ni tampoco un simple cachorro doméstico, puede que realmente su forma animal no sea realmente muy grandiosa pero no por ello carece de la hermosura que ese tipo de criaturas posee, es decir, agilidad, flexibilidad, imperiosidad, todo aquello es lo que describe a un tigre, un perfecto y balanceado tigre de bengala que no posee más imperfección que la marca que ha quedado sobre su orbe faltante.

¿Qué se puede decir sobre él y su personalidad? ¿Qué puede destacarse en él que le hace diferente a los demás?
Pues bien, empecemos diciendo que es arrogante y  altivo, un hombre con claras muestras de narcisismo y egocentrismo,  pero esto no es que le haga ser alguien difícil de tratar o alguien que va por ahí  haciendo  menos a cada quien con el que se topa, no es así, es un hombre de realmente fácil trato que suele  y puede llevarse bien con casi todo mundo y si bien no es que vaya por ahí buscando amigos o siendo amable con los demás es que él sabe cómo darse a querer y es que jamás se muestra falso hacia los demás, es directo y simplemente hace y dice las cosas tal cual como quiere que suenen. Cabe decir que no es del tipo de hombre que piensa en los demás al hablar, pues aquello sería una total mentira, para él no hay nadie más importante que sí mismo, no puede fiarse de los demás y aun cuando pueda sentirse cómodo en compañía de alguien más…. aun así se aislará del mismo, manteniendo secretos o hasta inclusive mostrándose algo reacio a la cercanía.

Por otro lado, es del tipo que prefiere hacer las cosas por su cuenta y no porque no pueda pedir ayuda o porque simplemente haya ocasiones en las que sea vea superado, sino más bien porque no puede dejar que su orgullo sea pisoteado al mostrarse débil y para él, necesitar de alguien, pedir ayuda o mostrar cualquier tipo de debilidad ante los demás es una forma de hacer ver que  él no es suficiente, que su orgullo ha de ser pisoteado para que pueda conseguir lo que desea.
Tiene terror al solo hecho de  no ser suficiente  para sí mismo, tiene terror a tener que ser alguien débil y más que nada tiene terror a tener que depender de alguien más, no tolera la idea de ser  un personaje secundario que se escuda en alguien más solo porque es débil.
Para él no existe otro protagonista de su historia que sí mismo,  no quiere volver a ser traicionado, no quiere regresar a sus antiguos días donde su confianza fue destruida del todo por alguien que no tiene mayor deseo de mencionar o recordar.  

Si bien podemos decir que este hombre derrocha seguridad  con cada palabra que su boca se atreve a soltar, es en realidad totalmente diferente pues aquella forma de ser es una manera en que él  se ha resguardado a sí mismo para no tener que acercarse en demasía a los demás, manteniéndolos a un margen donde pudiese sentirse cómodo sin tener que estrechar lazos con nadie y que así… sus más oscuros y devastadores secretos pudiesen  ser revelados y es que sí, pues aun y cuando es extremadamente sincero… es un ser lleno de secretos y misterios que lamentablemente no puede ni quiere revelar y especialmente cuando se trata de aquel lado oculto, ese lado triste, patético y débil que no quiere que nadie más vea.

Pero  ya pasando a otro lado de su personalidad, dejando de lado los misterios y lados ocultos,  pasamos a la parte de él que puede ser posesivo y caprichoso, egoísta y bastante celoso… un pervertido nato y es que es hombre y por ello mismo es que suele ser bastante sexual si se lo propone, es  sensual y coqueto, no posee  ni moral ni lógica y para él mientras se sienta bien y la persona le parezca atractiva y atrayente ¿por qué no?  La  verdad es que es bastante inhibido a la hora del coito y le gusta experimentar de todo un  poco, sin embargo tiene cierto complejo al ser el pasivo (le avergüenza su reacción poco “majestuosa”)  por lo que siempre evitar el intentar serlo a no ser que este realmente necesitado.

Roma 180 A.C

Ahí en medio de los suaves cojines de seda, ahí entre las sabanas de  hilos de seda china importados directamente para él, yacía ahí dormido el único y gran Cesar, gobernador de la Roma antigua, un hombre poderoso y netamente venerado por cada uno de sus súbditos amado por su pueblo y respetado por sus enemigos, el poder y la gloria veneraban a este hombre y los más grandes emperadores de la época, conscientes de que aquel sería alguien que pasaría en la historia, cegados por el próspero porvenir del joven gobernador le hicieron un regalo, un significativo regalo que prontamente adornó no solo todas las salas de las grandes cortes sino también las calles con su figura.

¿Qué fue lo que se le dio os preguntáis?

Simple, no se le dio ni más ni menos que una vida humana y no cualquier vida humana sino que la de alguien de prominente futuro, la vida de un joven sacerdote que había sido entregado a la corte de los dioses y que aun desde su tierna infancia había mostrado grandes dotes de adivinación y curación, pero aun cuando el romano estaba conforme con su regalo, la codicia y el deseo no se hicieron esperar en atacar a la mente del gran Cesar. Ansiando expandir su imperio utilizó hasta el cansancio los misteriosos poderes de su regalo, hasta el punto en que no había segundo en que el joven pelirrojo estuviera ahí escribiendo los mensajes de los antiguos dioses sobre los antiquísimos papiros.

Muchas veces las actitudes del joven fueron malinterpretadas llevándolo a sufrir diferentes castigos de parte del cesar; fue apuñalado, amarrado y usado  como un juguete del que presumía su gran señor en cada una de las reuniones que tenía ante las grandes familias que le seguían y sin embargo su lealtad no fue rota, sabía bien, entendía la necesidad de ponerle en su lugar y mostrarlo como si fuera su mascota para poder imponer su poderío más allá de lo imaginable, pero las torturas cada vez eran más y más continuas, su cuerpo fue manchado una y otra vez con la sangre de los esclavos en la arena, fue forzado a apagar las vidas de muchos y en un arranque de locura, aquel a quien algún día había jurado un grandioso rey como los dioses le habían pintado, arrancó uno de sus orbes de cuajo.

La herida jamás sanó, pues el emperador gustaba de jugar con la cuenca vacía, introduciendo objetos, sus dedos o hasta inclusive el probarle ojos de vidrios que terminaban manchados en el espeso carmín de la herida recién abierta.  El emperador había enloquecido de poder, su rey se había marchitado tras ser tan  reconocido y por ello mismo… debía silenciarlo, acabar con la vida de este antes de que cayera aún más profundo en la desgracia; y una noche así hizo, por primera y única vez se mostró ante su señor con una figura altiva y decidida... y tal como era de esperarse, no era más que un joven de unos 19 años quien se mostraba ante este, fuerte seguro y con una condición física envidiable, perfecto podría decirse, sin embargo no lo era, arruinando la simetría de su rostro aun  infantil yacía faltante uno de sus ojos, pues el parpado se mantenía cerrado con la herida aún abierta y un coste atravesando la misma.

Y entonces tras ver aquello fue que el Cesar le reconoció, lento se levantó hacia este, lento avanzó hacía su mascota y mucho antes de que pudiera decir nada, le abrazó con  fuerza, estrechándole entre sus brazos, pero ya para ese entonces toda sensibilidad ante las muestras de cariño habían desaparecido; su cuerpo se tensó por completo, más su expresión no vaciló en ningún momento mientras sus manos lentamente iban ascendiendo por la espalda de su señor y en un simple y frío “lo siento” el corazón de su amo fue atravesado por el filo de una de las dagas que muchas veces se habían ensuciado con la sangre de los esclavos en la arena…  ya no era el rey que conoció….no era más que una imagen vacía y ahora no era más que un envase que se había llenado de odio y malicia... ya no era él.
Su amo había muerto y con él su opresión, su locura  y la infamia que había cometido en sus últimos años donde había regido con crueldad a su pueblo.

Y así…aun cuando nadie le culpó… aun cuando  todos secretamente agradecían por su valiente hazaña… no dudaron en acabar con su vida…


No huyó, no peleó y lentamente fue devorado, desgarrado por los tigres que alguna vez habían sido alimentados por él mismo….




Lentamente abrió el único orbe restante, separando sus parpados con suavidad deshaciendo la oscuridad que alguna vez le había rodeado, no había dolor ni tampoco recuerdos que pudieran hacerle desear volver a una antigua vida…simplemente no había nada ni siquiera un nombre al cual evocar…¿Quién era? ¿Qué hacía ahí? Las preguntas asaltaron a su mente mientras que lentamente las instrucciones de un desconocido le eran grabadas en el mente... “obediencia” “lealtad” “muerte” aquellas tres palabras fueron las únicas que se grabaron en lo más profundo de su psiquis y con ello, una orden tan clara que jamás podría desobedecer.

Dicho aquello, lentamente fue transformándose en humano, lentamente fue parándose sobre sus dos piernas dejando en sí solo un par de orejas por encima de su pelirroja cabeza y  una cola rayada que se movía inquieta de un lado a otro.
Sin saber nada sobre su pasado avanzó en aquella tierra plagada de seres que jamás había visto, aunque no por ello se mantuvo quieto, la naturaleza curiosa de la raza  que le habían le hizo meterse en una serie de problemillas típicos de la inmadurez de un “recién nacido”.

Más su misión no tardó en llegar, lleno de una nueva sabiduría y poder ajenos a él se levantó entonces entre sus compañeros y marchó a la tierra que tiempo atrás se había encargado de arrebatarle todo lo que tuvo, pero ya no habían recuerdos dolorosos, no yacía nada más en él que el deseo de servir a la ordenanza que se le dio apenas abrió aquel único orbe restante.

Un suspiró salió suavemente de sus labios y salió entonces a ese mundo que desconocía, que no recordaba y que poco a poco fue aprendiendo de el mismo.
Los años pasaron y la vida fue haciéndosele cada vez más y más fácil y es que no era difícil engañar a hombres, mujeres o lo que fuera que se le pasará por delante, su personalidad fue haciéndose cada vez más altiva, más orgullosa…digna de un verdadero felino, más aun cuando la soberbia llenó su mente y  la lujuria inundó sus deseos se mantuvo firme ante su mandato entregando los continuos informes de la situación en la tierra…


Daba igual, su trabajo no era más que el que servir como informante y mientras pudiera cumplir con su función ¿Por qué  no divertirse en el proceso?